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Jun 05, 2023

Truckin' on: un estadounidense ucraniano de Filadelfia está trabajando para llevar ruedas al frente

Strakovsky, cofundador de Philly Stands with Ukraine, en su casa de Mount Airy, Pensilvania. Foto: Tyger Williams/The Philadelphia Inquirer/TNS Así que aquí está el plan: recaudar 8.000 dólares estadounidenses (36.388 ringgit) para comprar

Strakovsky, cofundador de Philly Stands with Ukraine, en su casa de Mount Airy, Pensilvania. Foto: Tyger Williams/The Philadelphia Inquirer/TNS

Así que aquí está el plan: recaudar 8.000 dólares para comprar la camioneta, una Ford F250 diésel grande y usada del año 2000, y enviarla a 4.300 millas (6.920 kilómetros) a través del mundo desde el sur de Jersey, Nueva Jersey, Estados Unidos, hasta Europa.

Desde allí –tal vez Polonia o Alemania– los contactos de la organización sin fines de lucro Amicus Ukraine llevarán el camión a Ucrania y luego lo entregarán a las unidades militares ucranianas. Equiparán el vehículo y lo conducirán hasta las líneas del frente, utilizando su fuerza para transportar equipo, evacuar a los heridos y luchar contra los rusos.

Sencillo, ¿verdad?

Bueno, admite Roman Strakovsky, analista de datos de Mount Airy y cofundador de Philly Stands With Ukraine, tal vez todo el asunto suene un poco descabellado.

Enviar un vehículo viejo tan lejos. Pagar para enviar 5.600 libras (2,54 toneladas) de camión al extranjero, no exactamente como enviar una caja de calcetines.

Pero, dijo, las fuerzas ucranianas necesitan desesperadamente camiones. Y las escasez y demandas de la guerra en realidad hacen que sea más lógico y económico comprar aquí y enviar allí, en lugar de tratar de encontrar el camión adecuado entre el stock caro y recogido en Europa.

"Mi esposa piensa que estoy un poco loco", dijo Strakovsky, quien es voluntario de Amicus Ucrania, con sede en Kiev.

Los amigos han sugerido amablemente lo mismo, pero “una vez que entras en los detalles y les explicas por qué es necesario y la logística, lo entienden”.

Este Ford en particular, un Lariat blanco, de cabina doble y súper resistente con tracción en las cuatro ruedas, espera en Brothers Auto Center, un concesionario de autos usados ​​en Clayton, ubicado justo al sur de Glassboro en el condado de Gloucester.

Hasta ahora, el esfuerzo de recaudación de fondos en línea ha generado alrededor de 1.700 dólares estadounidenses (7.732 ringgit) del costo de 8.000 dólares (36.388 ringgit). Eso se desglosa en aproximadamente 6.500 dólares (29.565 ringgit) por el camión y otros 1.500 dólares (6.823 ringgit) aproximadamente para enviarlo.

Marca otro gran esfuerzo de una comunidad ucraniana estadounidense del área de Filadelfia que ha dado un paso adelante para ayudar a sus compatriotas en casa. Las iglesias, organizaciones benéficas y organizaciones locales ucranianas estadounidenses han enviado bienes y suministros por valor de millones de dólares.

En un momento, las hermanas de St Basil en Jenkintown tenían cajas apiladas en lo alto, llenas de sacos de dormir, medicinas, ropa, andadores, sillas de ruedas, fideos ramen, barras de granola y más.

La región de Filadelfia alberga una de las comunidades ucranianas estadounidenses más grandes del país, unas 70.000 personas que son inmigrantes o tienen ascendencia.

Desde que Rusia invadió Ucrania en febrero de 2022, Estados Unidos y otros aliados occidentales han entregado miles de millones de dólares en armas. Ucrania se ha defendido, no sólo con su ejército, sino con todo lo que ha podido encontrar.

Eso incluye convertir camiones de pasajeros y SUV en vehículos de guerra, equipados con sistemas de artillería.

Amicus Ucrania ha importado casi 100 camiones, SUV, autobuses, camionetas y ambulancias, que se utilizan para transportar de todo, desde suministros humanitarios hasta personas y municiones.

El director Vitalii Naumenko dijo en una llamada telefónica desde Kiev que los camiones son los vehículos más demandados, necesarios por su potencia de tracción y durabilidad en las carreteras que a menudo sufren daños.

Las unidades de combate ucranianas siempre piden más camiones, afirmó.

Naumenko es un ex funcionario de aduanas de alto rango de Ucrania que ha utilizado sus contactos en la región del Báltico para importar vehículos, a menudo confiscados por las autoridades de Lituania.

Ese país, el primero en declarar su independencia total de la Unión Soviética después de la caída del Muro de Berlín, ha sido comprensivo con Ucrania mientras atraviesa su propia tensa relación con Moscú.

Desafortunadamente, dijo Naumenko, cada vez es más difícil encontrar camiones en Europa. Y cuando se ubican, tienden a tener un precio excesivo.

Strakovsky dijo que ahí es donde entra él, que vive en Estados Unidos, la tierra de las camionetas. Después de enterarse de la necesidad de camiones, empezó a mirar anuncios y a evaluar posibilidades.

Este Ford es un modelo 2000 y tiene poco menos de 300.000 millas (482.803 km) en el odómetro.

Uno nuevo puede costar fácilmente más de 50.000 dólares. Pero no tiene mucho sentido gastar esa cantidad de dinero.

Naumenko dijo que los camiones convertidos en vehículos de combate tienen una vida útil corta porque inmediatamente se convierten en objetivos de las fuerzas rusas.

"Dispararán a cualquier cosa que se mueva", dijo.

Además del uso militar, dijo Naumenko, la entrega de camiones tiene un significado importante para las tropas ucranianas.

"Saben que no están solos en esto", dijo. "Que la gente no se queda al margen, sino que da un paso al frente y ayuda, especialmente en Estados Unidos". – The Philadelphia Inquirer/Tribune News Service

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